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#COMUNICADO
- Propone Omar Ortega que no sólo sean opción del Presidente, sino obligación si no tiene mayoría en al menos una cámara del Congreso
- Se trata –dijo- de fortalecer al Ejecutivo dotando de legitimidad a sus decisiones y garantizar la gobernabilidad democrática del país
- Hoy tenemos gobiernos autocráticos sin respaldo social suficiente, puntualizó con sus correligionarios Martínez Neri y Jesús Zambrano
Debido a la debilidad y carencia de legitimidad de gobiernos electos por minorías electorales en nuestro país en los últimos años, a su vez resultado de la pluralidad social, fragmentación de fuerzas políticas y alta competitividad, el diputado Omar Ortega Álvarez propuso reformar la Constitución para garantizar la gobernabilidad democrática mediante gobiernos de coalición.
En una iniciativa para tal efecto, el coordinador de Proceso Legislativo del GPPRD en la Cámara de Diputados planteó modificar los artículos 74, 76 y 89 de la Carta Magna.
En el documento -también suscrito por el coordinador y vicecoordinador del GPPRD, respectivamente Francisco Martínez Neri y Jesús Zambrano Grijalva-, argumentó que desde 1997 se observa en México una tendencia a la fragmentación de las fuerzas políticas, por lo cual ninguna de ellas alcanza por sí misma la mayoría en las elecciones del Legislativo y del Ejecutivo.
“Este hecho y el diseño de nuestro sistema presidencial vigente –dijo- complica la construcción de gobiernos de mayoría que ayuden a legitimar a las instituciones del poder público”.
Más grave aún, da lugar a un gobierno autocrático que pretende mandar sin el respaldo suficiente de la sociedad.
“La experiencia y la evidencia histórica reciente demuestran que un gobierno sin sustento parlamentario suficiente para desarrollar su programa se asemeja más a un esquema autocrático que pretende mandar sin el respaldo suficiente de la sociedad y con una representación política mayoritaria en su contra”, precisó.
Aclaró que el PRD, aunque cuestiona el presidencialismo exacerbado que en los hechos diluyó la división de poderes y los contrapesos institucionales, y que además pretendió debilitar la pluralidad política y el Estado de Derecho mismo, se pronuncia por mantener el sistema presidencial, pero con instrumentos parlamentarios.
Reconoció la evolución del sistema político mexicano en virtud de diversas reformas político-electorales en los últimos años que reconocen la pluralidad y diversidad política de la sociedad y su reflejo en las instituciones.
En este sentido, su propuesta también toma nota de esa pluralidad y competitividad política existentes, así como los avances de la reforma constitucional de 2014 en cuanto a la opción de construir gobiernos de coalición por parte del Ejecutivo, pero al mismo tiempo considera que esta facultad opcional es insuficiente y debe ser obligatoria en ciertas circunstancias.
Específicamente, si el Presidente de la República tiene mayoría absoluta en cuando menos una de las dos cámaras que integran el Congreso de la Unión, entonces podrá gobernar en un esquema presidencial tradicional.
En caso contrario –es decir, si el Presidente y su partido no tienen mayoría absoluta en ninguna de las dos cámaras del Congreso-, entonces obligadamente, y ya no optativamente, deberá construir un gobierno de coalición.
Ortega Álvarez también aclaró que el objetivo fundamental de su propuesta no es debilitar al Poder Ejecutivo, sino facultarlo para construir y fortalecer la gobernabilidad con el respaldo del Congreso de la Unión.
Al mismo tiempo el Congreso y sus cámaras integrantes actuarían como contrapeso y órgano de control que obligue al Ejecutivo a cumplir estrictamente sus facultades, a rendir cuentas y a compartir atribuciones con el Legislativo.
Así, la responsabilidad del gobierno recaería en una coalición, en tanto la oposición concentraría la crítica de las políticas públicas, la construcción de alternativas políticas y, eventualmente, la emergencia de un nuevo gobierno con una nueva mayoría, resultado de las urnas y los acuerdos, de ser el caso, para un gobierno o una coalición de gobierno alternativa.
“En una coalición de gobierno, la mayoría plural construida en las Cámaras del Congreso tendría la facultad de aprobar y ratificar al gabinete presidencial, dando vida, precisamente, al acuerdo que debe sustentar a la coalición de gobierno”.
Recordó que la facultad de formar gobiernos de coalición en los estados también fue propuesta ya por el GPPRD y aprobada por la Cámara de Diputados. Confió en que a la brevedad también lo haga el Senado.
