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*.- La chiquillada detrás de Benjamín
#Opinión Rosy RAMALES
En Oaxaca, el dinosaurio ya tiene dolores de parto. Y como dice la letra de la canción “El de la banca de atrás”: Pues “solo Dios dirá, qué será, será”. Bueno, en este caso no precisamente Dios, sino la cúpula priista.
Por lo pronto, anoche confirmaron la celebración de la firma del Pacto de Unidad entre la y los aspirantes a la candidatura del PRI a la gubernatura oaxaqueña, allá por el medio día de este jueves. Y seguramente se llamará “Acuerdo de Unidad por el Futuro de Oaxaca”.
Igualito que el “Acuerdo de Unidad por el Futuro de Puebla”, que ayer firmaron los aspirantes poblanos. Los zacatecanos signaron uno idéntico, etc. Y como parece un “machote” al cual le cambian el nombre según la entidad de que se trate, probablemente el contenido es similar, entonces es de esperarse que este jueves la versión oficial sea más o menos la siguiente:
Que la y los aspirantes “se reunieron con el presidente del CEN, Manlio Fabio Beltrones, para informarle del ‘Acuerdo de Unidad por el Futuro de Oaxaca’, que establecieron con el compromiso de mantener la unidad y apoyar la precandidatura única recaída en ‘Y’, en los términos de la convocatoria que habrá de emitirse el 23 de enero”.
Ello porque están convencidísimos de que solamente unidos ganarán. Luego Manlio felicitará a la y a los aspirantes, los apapachará, les dirá que cada uno ganaría la gubernatura oaxaqueña de manera arrolladora, pero pues lástima-Margarito porque solo puede haber un candidato o una candidata, y la decisión ya está tomada. Claro, a la luz pública saldrá la versión bonita, nunca la manita de puerco ni ninguna acción represiva para aplacar el ánimo de quienes resulten descalificados por la cúpula priista.
¿Y quién habrá de recibir la bendición de la cúpula? Pues hasta anoche no se le podía ver la cara. Parece un parto complicado, el bebé o la bebé parece venir atravesado y hasta con el cordón umbilical enredado; el alumbramiento requerirá más que de una cesárea, de una cirugía con bisturí de alta precisión.
Claro, las circunstancias pueden cambiar y mejorar; incluso, en cuestión de horas, minutos o segundos. Es más, el alumbramiento puede ocurrir antes de la expedición de la convocatoria al proceso interno, lo cual ocurrirá el 23 del mes en curso; o sea, el próximo sábado; o aguantar hasta el día del registro de aspirantes, el 2 de febrero próximo. La situación es tan imprevisible e impredecible, que el dinosaurio hoy mismo puede parir.
En fin, lo que sí está confirmado es que la y los aspirantes a la gubernatura oaxaqueña fueron citados para la firma del Acuerdo de Unidad, aunque no todos son nacidos en Oaxaca, ni todos conocen la realidad de esta entidad sureña, ni todos garantizan unidad, ni todos son garantía de gobernabilidad.
Lo que no está confirmado es quiénes fueron citados a firmar el papelito. Pero en los corrillos priistas se siguen manejando los nombres de los cinco internos que en este espacio dimos a conocer desde la madrugada de ayer: Mariana Benítez Tiburcio, Eviel Pérez Magaña, Samuel Gurrión Matías, Alfonso Gómez Sandoval Hernández y Alejandro Murat Hinojosa. Además, la posibilidad del “simpatizante”, Gerardo Gutiérrez Candiani.
¿Quién será el cuadro que encarne la candidatura del PRI a la gubernatura de Oaxaca? La decisión es vital para el triunfo o para una nueva derrota. Solamente quebrando la coalición PAN-PRD y demás aliados, el Revolucionario Institucional podría ganar con el peor de los candidatos, y eso, inyectándole mucho dinero.
En fin, ya solo faltan horas para saber qué destino han decidido para el PRI la entidad oaxaqueña.
LA CHIQUILLADA
Caray, es una verdadera lástima que partidos chicos, pero sobre todo de origen indígena, anden rogándole a Benjamín Robles Montoya para que defina su participación en una alianza con éstos o con el PRD-PAN, como candidato a Gobernador de Oaxaca.
Incluso, el senador ya hasta se registró como precandidato a la candidatura perredista. Ya está participando en un proceso interno, ¿legalmente puede participar en otro?
Los partidos locales, vía sus dirigentes, Unidad Popular (PUP) y Social Demócrata (PSD) dieron una conferencia de prensa donde hasta ultimátum de 48 horas le dieron a Benjamín Robles, quien con su registro en el PRD francamente ya los bateó o, por lo menos, ya los relegó a segundo plano.
Tanto el PUP como el PSD obtuvieron su registro mediante organizaciones indígenas, entonces hasta una burla resulta llevar como candidato a un occidental, del cual ni siquiera se tiene la seguridad de haber nacido en el estado de Oaxaca. Claro, Benjamín ya reúne los requisitos constitucionales y legales de residencia efectiva, no tiene problema en ese sentido.
Es más, él no tiene problema. El problema lo tienen los partidos que andan detrás de él a falta de cuadros propios. Es evidente, que su intención es solamente conservar el registro postulando a quien le represente votos sea quien sea. Pero a Benjamín Robles seguramente le interesa ser candidato de fuerzas electorales altamente competitivas.
