La paz social y el respeto son pilares fundamentales para la convivencia armónica y el desarrollo económico.
No se deben tolerar este tipo de agresiones, y las autoridades deben intervenir para garantizar que las marchas se realicen en un marco de respeto y legalidad
La Confederación hace un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas inmediatas y eficaces para prevenir futuros actos de violencia y vandalismo en las manifestaciones.
Ante los recientes actos de vandalismo ocurridos en la marcha conmemorativa del 56 aniversario de la matanza de Tlatelolco, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo de los Estados Unidos Mexicanos (CONCANACO SERVYTUR), presidida por Octavio de la Torre, hizo un llamado a las autoridades y a la sociedad para priorizar el orden, la paz social y el respeto mutuo durante las manifestaciones, garantizando que el derecho a la protesta no afecte los derechos de los demás.
La Confederación subraya que las manifestaciones son un derecho legítimo de la ciudadanía, sin embargo, su ejercicio no debe implicar agresiones o daños a terceros. Al manifestar que las protestas deben realizarse en un marco de respeto, sin violencia y sin causar daños a la propiedad privada o pública.
Además, rechazó enérgicamente los actos de vandalismo que afectaron monumentos y comercios en la Ciudad de México, y llamó a las autoridades a actuar con firmeza, aplicando la ley para prevenir y detener este tipo de agresiones en futuras manifestaciones, no solo en la capital del país, sino en todo el territorio nacional.
En el contexto de la marcha, se registraron daños a más de 7 mil 500 negocios en el centro de la Ciudad de México, lo que generó pérdidas por más de 23 millones de pesos, afectando tanto a comerciantes como a los ciudadanos que dependen de estos establecimientos para su sustento.
Octavio de la Torre refirió que los actos vandálicos no solo lesionan la economía local, sino que también ponen en riesgo el patrimonio cultural de la nación localizados en todo el país, que incluye 33 sitios inscritos en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, de los cuales 27 son bienes culturales.
Dijo que es fundamental recordar que México cuenta con un vasto patrimonio cultural, protegido por la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos (1972), donde se establece que quienes dañen, alteren o destruyan un monumento pueden enfrentar penas de tres a diez años de prisión, así como multas económicas.
“Exigimos que se aplique la ley de manera rigurosa para proteger los negocios y empresas familiares son el sustento de familias que también luchan por superarse a diario. El respeto por los monumentos históricos y el patrimonio cultural es una responsabilidad de todos los mexicanos. Los monumentos son testigos de nuestra historia y cultura, y su protección es un deber compartido entre el gobierno y la ciudadanía», insistió Octavio de la Torre.
Reiteró su postura de que las manifestaciones deben respetar tanto los derechos de los manifestantes como los de los ciudadanos afectados por actos de violencia. La paz social y el respeto son pilares fundamentales para la convivencia armónica y el desarrollo económico.
La Confederación hace un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas inmediatas y eficaces para prevenir futuros actos de violencia y vandalismo en las manifestaciones.
“No se deben tolerar este tipo de agresiones, y las autoridades deben intervenir para garantizar que las marchas se realicen en un marco de respeto y legalidad en todo el país”, concluyó Octavio de la Torre.
Los actos de vandalismo no solo dañan el patrimonio cultural y los comercios, sino que también afectan la paz social y el desarrollo de nuestras comunidades. Es hora de construir un México donde el derecho a manifestarse se ejerza sin agresiones, y donde el respeto a la ley sea la norma.