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Lavadero Politico

# Opinión Roberto Molina

 

Dicen que “el que tiene más saliva traga más pinole”, (y el que no, pues que consiga más gaznates), tal y como demostró esta semana Ricardo “El Ricky Ricón” Anaya, líder del Partido Acción Nacional, y junto con su parentela también líder de mercado de bienes en raíces en Querétaro. Todo esto cuando destaparon la cloaca que tenía bien guardadita. Resulta que Ricky Ricón Anaya en 14 años de carrera política panista, pasó (junto con sus familiares políticos) a formar parte de la “high society”, todo esto a puro pulso y con arto ritmo para pegarle al cajón en la presidencia del PAN.

Demostrando ser más vivillo que él mismo Donald Trump a la hora de los “bisnes”, Ricky Ricón Anaya, y sus parientes políticos, lograron ampliar un imperio inmobiliario, que constaba de humildes cuatro empresas.

Ahora pasó a tener las 17 más productivas, al incrementar de seis inmuebles, con un valor de 21.9 millones de pesos, a 33 “pequeños locales” acercándose al valor comercial de por ahí de los nada menos despreciables 308 milloncitos de devaluados pesos.

Después de que un conocido periódico publicara una investigación de más de 50 actas notariales asentadas en el Registro Público de la Propiedad y del Comercio del estado de Querétaro, salió a relucir que el mismito Ricky Ricón Anaya; su esposa, Carolina Martínez Franco; sus suegros, Donino Ángel Martínez Diez y Maribel Natalia Franco, y sus cuñados, José Ángel y Natalia, forman parte de este conglomerado, quedó claro por qué es el yerno consentido de don Donino, esposo ejemplar y cuñado a toda madre que Dios en su inmensa sabiduría les pusiera en su camino (toda una bonita y tierna historia).

La cosa es que Ricardo Anaya, no solo le ha entrado con todo a eso de la fama y la artisteada política, sino que también le sabe para hacer crecer y bien (rápido) sus changarros, su fortuna y la de sus afortunados y consentidos, suegros y cuñados.

Después de que El Ricky Ricón Anaya llegara en 2003 a las grandes ligas de la política queretana, charoleó como secretario particular y coordinador de Desarrollo Social del entonces gobernador de Querétaro, Francisco Garrido Patrón (PAN), hasta por ahí del 2009. Tiempo suficiente para que, su suegro pasara de administrar restaurantes balines a incursionar en la prolífera industria inmobiliaria, constituyendo cinco nuevas empresas y adquiriendo propiedades a diestra y siniestra.

En su declaración 3 de 3 Anaya reportó ser un humilde accionista de dos de las 17 empresas que ahora salen a la luz, y que ostentan los nombres de Cintla, con 50%, y Juniserra, con 42% en acciones (nada más para sus chuchulucos).

Lo que en su momento sirviera para taparle el ojo al macho, ya que si recordamos, a Riky Anaya le gustaba viajar cada fin de semana a los “yunaites” a un humilde pueblo llamado Atlanta, donde radicaban sus vástagos y su peor es nada, información que cuando salió a relucir, el “bisnero” Anaya respondió que no solo le sabía para ser un político de los buenos, sino que también tenía unos “localitos” que rentaba para completar la despensa y pagar las colegiaturas de los chamacos.

Ante todo, esto no se hicieron esperar las reacciones, y como buen ajonjolí de todos los moles el que ni tardo ni perezoso salió a hacer su mitote, fue el líder supremo de los chairos del país, El Peje, quien ya salió a decir que Anaya y el Gel-Boy se jalaron los pelos y se enseñaron la lengua, y que por eso le sacaron su mugrero a la luz.

“…estaban muy amigos (Peña y Anaya), pero ahí, en la mafia del poder también se pelean y se sacan sus trapitos al sol”.

Así mismo dijo: “El PRI y el PAN es lo mismo, los domina la mafia del poder, usa a un partido o usa otro. Ahora ya sabemos qué van a hacer para tratar de frenarnos. Sacan dos candidatos: el del PRI va a haber un destape, Peña Nieto va a imponer al candidato del PRI al estilo de siempre, y también los de la mafia del poder van a imponer al candidato del PAN y del PRD, entonces son dos”.

Otro que también le encanta el arguende es el dirigente nacional del PRI, el Clavillazo Enrique Ochoa Reza, quien tampoco hizo tardar sus reacciones y se sacó la puntada de “solicitarle” al panista que aclare de donde saco tanto talento para los negocios (o más bien la lana).

“Tiene que aclarar con toda puntualidad los señalamientos que ha hecho un medio de comunicación serio y profesional, y que no trate de distraer a la opinión pública con la teoría del complot que le está siguiendo a su maestro López Obrador. Que dé respuesta a las acusaciones con toda puntualidad y que deje de buscar chivos expiatorios”

Al ver que estaban de a peso los madrazos, El Ricky Ricón Anaya se trepó en su mula y dijo que no sabe de qué hablan, y que todo esto es una estrategia del PRI y del Gel Boy para manchar su buen nombre y distraer la atención pública de lo que verdaderamente importa.

“No tengo nada que ver en ningún negocio de mi suegro, no puedo entrar en detalles porque ni siquiera los conozco”, afirmó.

Refiriéndose a la discusión sobre el pase directo del actual procurador General de la República, para convertirse en fiscal general -que no ha sido analizada en los últimos días por los órganos legislativos- y como panista preocupado por el futuro de dicho órgano, dijo que había intereses ocultos, y que él solo es una víctima que lucha contra el cruel y despiadado Gel-Boy y sus secuaces.

“Lamentablemente es más complejo que una persona, son muchísimos los intereses del PRI-gobierno para dejar a un fiscal general a modo”, añadió.

Así mismo dijo que era muy oportuno el momento en que salió esa información, ya que también había recibido distintas amenazas (incluso del mismo medio que lo publicó) antes de que saliera a relucir todo el tesorito que Anaya tenía en su familia política.

“En política no existen las causalidades, por algo suceden las cosas. Este escandalito que me está tratando de armar el gobierno tiene una razón y yo lo quiero decir con absoluta transparencia”, concluyó diciendo en una entrevista de radio.

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En esta misma semana salió por a fin a relucir el nombre de quien llevaría los colores de Morena a la candidatura por el gobierno de Ciudad de México, y la que sacó el premio fue Claudia Sheinbaum, quien en sus ratos libres charolea como delegada en Tlalpan, y que después de una acalorada encuesta al interior de Morena (samamada), se vistió con el triunfo superando a los mismísimos Martí Buitres y Ricardo Monreal (¡Tómala!).

Hace unos días el Partido Movimiento Regeneración Nacional, y su mero mero líder chairo Andrés Manuel López Obrador anunció que la ganadora del concurso Miss Candidata 2017 fue la delegada Claudia Sheinbaum, y sin decir cómo ni cuándo, anunciaron con bombo y platillo su triunfo ante los otros izquierdistas que también tenían puestas sus aspiraciones en la grande para el gobierno de la CdMx (Gacha su calavera).

Pero como el padre destino no endereza jorobados ni está para cumplir sueños, de la nada Sheinbaum se levantó para la grande, aunque los mal pensados dicen que fue un dedazo de su Santidad el Peje, para evitar que se le pusieron locos dos de sus lacayos (Buitres y Monreal), y se agarraran “a la salida”. El peje en su gran y omnipotente sabiduría optó por la salomónica decisión de poner a una que estuviera en medio.

Después de que se diera a conocer (sin ningún tipo de pruebas) que Sheinbaum Pardo ganara la encuesta elaborada por Morena para ser la coordinadora y la virtual candidata a la jefatura de Gobierno, durante conferencia de prensa, dos de los competidores: Martí Batres, presidente del partido en la capital, y el senador Mario Delgado (como muestra del fair play que reina en la política interior del partido) alzaron los brazos de su compañera para reconocer su triunfo, cosa que no podemos decir los mismo de Ricardo Monreal, quien brilló por su ausencia en el citado evento.

Para evitar que las malas lenguas comenzaran a destilar sus feos venenos, la ahora mera mera para la jefatura de gobierno en CdMx, minimizó el hecho y dijo que su colega y mal perdedor Ricardo Monreal, andaba muy atareado en su chamba, y que no pudo asistir al magno evento, pero es cuate y que no tiene por qué mal interpretarse su ausencia.

“Ricardo Monreal” es parte de este equipo, si no pudo venir no tiene por qué malinterpretarse, tenía tareas en la delegación Cuauhtémoc y somos parte de un equipo, la unidad de Morena está encima de todo”.

Así mismo, Martí Batres dijo que desde 2015 las encuestas siguen un protocolo similar, en el que “se cita a los participantes y se leen los resultados, no hay una cosa nueva”.

Por su parte el senador Mario Delgado afirmó. El jueves “tuvimos pleno acceso” a los datos de la encuesta.

“No es un asunto de numeritos, sino de una valoración conjunta de variables y que son medidas o ponderadas”.

Con sabor agridulce comienza la carrera de Sheinbaum para la grande en la Ciudad de México, y ahora toca esperar si Monreal se alinea en honor a la democracia y al movimiento moreno, o sale con una bien conocida candidatura patito para mermar a su colaboradora y sanar un poco su herido corazón.

Por supuesto que su humilde escribiente no denosta la trayectoria de la Dra. Sheinbaum, sino más bien nos parece una rudeza innecesaria el trato que recibiera Ricardo Monreal, quien es uno de los personajes que más aportó a la Causa de López Obrador en los momentos difíciles.

Y es que para apartarlo de la jugada se apoyaron de encuestas amañadas, oscuras y tramposas usando patiños quienes sin el menor pudor filtraron que Monreal se encontraba tercero y hasta cuarto, cuando en al menos 15 encuestas (este si de empresas reconocidas) le daban la ventaja.

Y López Obrador se le olvidó muy pronto el actuar de las tribus perredistas ahora el mesías denuesta, humilla y ofende a todo aquel que pueda brillar con luz propia

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