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D. Estrada
Huajuapan de León, Oax. – Como cada año, habitantes y paisanos radicados en la Unión Americana se concentran en el municipio de Santos Reyes Tepejillo para participar en la fiesta patronal en honor a los Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltasar.
Francisca Cruz Aguilar, vecina de Tepejillo y autora del libro “Tepejillo en la voz sus ancianos” contó que, como la mayoría de los pueblos indígenas en México, durante la invasión de América los habitantes fueron colonizados y obligados a cambiar sus deidades por otras representadas por santos católicos.
A pesar de que no existen documentos que informen sobre la historia de la comunidad, desde el año 1687, cuando fue fundado el pueblo, los habitantes ya realizaban tributo a los Reyes Magos el 6 de enero.
Los festejos inician subiendo al cañón Ñuu Kavaá, en donde se lleva a cabo un ritual de sacrificio en la cueva llamada La casa de la lluvia, lugar que cuenta con diferentes vías subterráneas que a la fecha no han sido exploradas en su totalidad.
“Esta tradición es muy antigua, los abuelos cuentan que anteriormente rendían ofrenda a los elementos del agua, viento, tierra y fuego. Ahora los ancianos de sabiduría hacen un pedimento en el exterior y adentro de la cueva para que toda la fiesta salga bien; que la gente no pierda el interés de cosechar, para que sigan las costumbres y reine la paz en nuestro municipio”, comentó.
Contó que hace muchos años la cofradía de San Marcos tenía bajo posesión a los dioses de la lluvia y de los rayos, por lo que el día de San Marcos, iban a la Casa de la Lluvia con una banda de viento, cuetes, aguardiente, pulque, velas, llevaban gallos, chivos y guajolotes, estos últimos eran sacrificados durante un ritual.
Sin embargo, lamentó que la tradición de visitar las cuevas se está perdiendo. Subrayó que en 2005 un grupo de personas se organizaron para seguir fomentando los pedimentos, pero eran particulares que no pertenecían a ninguna cofradía.
Pueblo de conciencia
Francisca Cruz explicó que 1987 cuando era joven, existían 10 cofradías, por lo que casi todo el año había fiesta en Tepejillo, situación que generó inconformidad en los jóvenes, pues los padres sólo se la pasaban en las fiestas y no aportaban recursos para la educación de sus hijos.
“Nos organizamos para hacer conciencia y pedimos a la autoridad que eliminaran ocho cofradías, aceptaron y sólo quedaron la de los Reyes Magos y la del Quinto Viernes, en honor a Jesucristo”, comentó.
Mencionó que actualmente la fiesta de los Reyes Magos es la más grande, la cual inicia desde el primero de enero y concluye día seis, en ella participan todos los habitantes y migrantes que retornan para estar con sus familias.
El antiguo Tepejillo, Ñuu Kavaá Shinikavaá
Cruz Aguilar explicó que en el paraje La Muralla, una construcción antigua que rodea al cañón Ñuu Kavaá , se encontraba anteriormente la comunidad de Tepejillo. Dijo que ante la falta de archivos históricos comenzó a investigar la historia con los ancianos.
“La muralla es una fortaleza en donde sucedió algo muy importante; nuestra gente tuvo problemas por tierras con los de San Miguel Tlacotepec, se atacaban con flechas. Para protegerse los de Tepejillo construyeron la muralla, aquellos también lo hicieron, pero su técnica no les funcionó y se derrumbó. Por eso en Tlacotepec se encuentra el Cerro Chillón, pues se dice que todos se pusieron a llorar cuando eso sucedió”,
Enfatizó que en la muralla Ñuu Kavaá Shinikavaá es una construcción que está conectada con diversas cuevas que se conectan en el interior del cañón, en donde han hallado restos humanos, vasijas e instrumentos que fueron usados para realizar ofrendas.
Tabayuku, ser sobrenatural
Doña Francisca relató que Tabakuyu es un ser sobrenatural que se encuentra dentro de los mitos y leyendas de Santos Reyes Tepejillo, es una figura femenina que seduce a los hombres, sufre transformaciones y en algunas ocasiones cobra la vida de hombres, sí estos no acuden con un curandero.
“Tabayuku vive en los montes, tiene apariencia de ser humano y de animales. El señor José Martínez Rojas es uno de los habitantes que ha logrado vivir esta experiencia sobrenatural”, mencionó.
Narró que, a la edad de 8 años, José recibió seis chivos como regalo por parte de su padre, quien le encomendó cuidarlos. El niño acostumbraba llevar a sus animales a la muralla, en donde un día subió a un árbol para cortar algunas ramas.
En ese momento vio a dos mujeres acercándose cargando una canasta pequeña; las dos de cabello largo y ojos grandes. José observó a las féminas y notó que cuando estas caminaban, no doblaban sus rodillas.
“Se preguntó qué eran y se asustó tanto que bajó del árbol y miró por última vez, las mujeres le hicieron señas para que no se fuera, pero José corrió tan rápido olvidando a sus chivos. Después llegó a un pozo, esperó un rato y sus animales llegaron hasta él”, comentó Francisca.
Subrayó que, al contarle a su padre, éste le advirtió que jamás volviera a la muralla, pues lo que había visto eran tabayukus. Agregó que después de cenar, José se fue a dormir y en sus sueños aparecieron las dos mujeres, quienes le preguntaron por qué había corrido, pues le iban a regalar un marranito.
“Como José era muy pobre, su sueño siempre fue tener algo; siguió yendo a la muralla para ver si volvía a encontrar a las mujeres, pero jamás las volvió a ver”, apuntó.
Francisca Cruz dijo que a través de la unidad continúan fomentando las tradiciones y la lengua originaria en Santos Reyes Tepejillo, comunidad que luchan por convertir en un importante paradero turístico, gastronómico y cultural.
Buscan limpiar la imagen de Tepejillo
Lorenzo Juan Cruz Chávez, exedil de Tepejillo, mencionó que al igual que otros municipios de la región, la gente en las ciudades ha creado conceptos equivocados de las comunidades, principalmente por la supuesta presencia de estupefacientes.
“Queremos demostrar con acciones una cara diferente de Tepejillo, nuestra gente es cálida y todos los que vienen son bien recibidos. Sabemos lo que la gente comenta, pero no hay nada mejor que vengan con sus familias a vivir la riqueza de nuestra región”, expresó.
Tabayuku
Así llaman los mixtecos de Juxtlahuaca a una figura femenina que seduce a los hombres, los lleva a una cueva y los enloquece. La víctima muere si no es llevada con un curandero.
Los mixtecos de Jamiltepec utilizan este término para designar a un animal que sufre transformaciones . Se llega a saber que uno está frente a un tabayuku cuando se ve de pronto un lince que gira sobre sí mismo y se transforma en coyote; éste a su vez da otra vuelta y se convierte en una leona. El tabayuku generalmente se les aparece a los cazadores y los enferma de susto.
Datos históricos
Este pueblo se fundó 1687, durante la Época Colonial, hasta la fecha se carecen de títulos, pero según su tradición fue en el siglo XVII su fundación. El 14 de diciembre de 1872 mediante un decreto fue segregado al distrito de Silacayoápam agregándole al que hoy pertenece.
La Muralla
El cerro amurallado, conocido como Ciudadela está ubicado a cuatro kilómetros de la población. Es la zona arqueológica de mayor importancia en la comunidad y mejor conservada, parece una fortaleza militar dividida en varias murallas por dentro.
Shinikavaá
El montículo principal de Shinikavaá, representa al viejo Tepexi. Ésta fue la principal zona piramidal que aún no ha sido explorada, puesto que a flor de tierra se pueden apreciar las escalinatas, por los lados se observa la construcción de lo que fue parte de la gran pirámide.
Tepejillo fue uno de los tantos pueblos mixtecos sometidos al imperio mexica y conocido en náhuatl de la siguiente manera: Tepexicoapan, que traducido al español quiere decir: tepexi= tepetate, coa= copal, pan= lugar; por lo que sería: lugar del copal sobre tepetate ( Según el registro del Museo Regional del Estado de Oaxaca, Archivo del ex convento de Santo Domingo de Guzmán).
Ubicación geográfica
Sobre la carretera Oaxaca-México 190, antes de llegar a la ciudad de Huajuapan de León, existe un letrero que dice Santos Reyes Tepejillo 72 km, para acceder se entra en una desviación hacia el lado izquierdo, está pavimentada hasta llegar a Tezoatlán de Segura y Luna, municipio perteneciente al distrito de Huajuapan.
Limita al norte con Tezoatlán de Segura y Luna y Silacayoápam; al sur con San Juan Mixtepec; al oriente con San Antonino Monteverde y San Juan Ñumi; al poniente con Ixtantepec Nieves y San Miguel Tlacotepec. Su distancia aproximada a la capital del estado es de 300 kilómetros.
Fotos: D. Estrada y Cortesía.
