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Detrás de la noticia: Extorsión militar y policíaca obliga a narcos a delinquir

Opinión por Alfredo Martínez de Aguilar

  • Un aspecto poco observado hasta ahora es que ante la presunta extorsión militar y policíaca, los carteles del narcotráfico, se han visto obligados a migrar a la comisión de delitos del crimen organizado.
  • Indispensable es insistir que los causantes de la creciente inseguridad y brutal violencia, no es por sí mismo el crimen organizado y el narcotráfico, sino sus cómplices en la narcopolítica y la narcoeconomía.

A pesar que a primera vista el problema de la creciente inseguridad y brutal violencia parece complicado y complejo, no lo es tanto, si se realiza permanente trabajo de inteligencia policial.

Los delincuentes de todo tipo, desde el ladrón común y corriente, y el delincuente de “cuello blanco”, hasta los integrantes del crimen organizado y del narcotráfico, no son “fantasmas”.

Tampoco son seres extraterrestres. Por tanto, tienen nombre, apellido y familia nuclear y ampliada, padre y madre, hermanos y hermanas; esposa hijos e hijas, amigos, novias y amantes.

En mayor o menor medida, todos ellos son beneficiarios del dinero mal habido, al igual que militares, jefes y elementos de las corporaciones policíacas federales, estatales y municipales.

Éstos últimos integran las amplias redes de complicidad que les garantizan seguir operando con total impunidad. Obligado es investigarles para combatir realmente la inseguridad y violencia.

Un aspecto poco observado hasta ahora es que los carteles del narcotráfico, se han visto obligados a migrar a la comisión de delitos del crimen organizado ante la presunta extorsión militar y policíaca.

Indispensable es insistir que los causantes de la creciente inseguridad y brutal violencia, no es por sí mismo el crimen organizado y el narcotráfico, sino sus cómplices en la narcopolítica y la narcoeconomía.

A partir de la década de los 70 está ampliamente documentado cómo los presidentes de la República y sus jefes políticos partidistas, militares y policíacos, son los verdaderos capos de capos.

Cooptado por José Guadalupe Zuno Hernández, presunto capo de capos en el Occidente de México, LEA se hospedaba en la narco residencia de su cuñado Rubén Zuno Arce, en Lope de Vega 881, en la colonia Jardines del Bosque en Guadalajara, Jalisco.

Años después, presuntamente la propia agencia antidrogas de Estados Unidos, la DEA, ordenó a Rafael Caro Quintero que torturaran y callaran a su agente Enrique “Kiki” Camarena Salazar.

El “Kiki” estaba decidido a denunciar que, con el apoyo de la CIA y la DEA, el cartel de Guadalajara financiaba la compra de armas para la contra nicaragüense y enfrentar a la guerrilla sandinista.

Reportes de inteligencia revelan que para que pudiera operar de forma libre Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los Cielos, sobornó y entregó millonarios regalos en dólares al expresidente Carlos Salinas de Gortari.

El narcotraficante colombiano Fabio Ochoa, declaró que El Señor de los Cielos presumía tener a Carlos Salinas de Gortari en su ‘nómina’. El narcotraficante Alejandro Bernal Madrigal señaló que el exmandatario recibió como regalo un Rólex con diamantes valorado en un millón de dólares.

La complicidad con el narco no es exclusiva de la mafia del poder del PRIAN; se hace extensiva a las mafias de las cúpulas de la partidocracia, es decir, a todos los partidos, de izquierda y derecha.

Ni la moralina cristiana pentecostal pone a salvo al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el poder presidencial. Sus dirigentes son corruptos ex priistas, panistas y perredistas.

La Guardia Nacional es un fracaso en el combate a la creciente inseguridad y brutal violencia en Oaxaca y en México. Lo peor, sus elementos son desarmados y humillados por los delincuentes.

No dejan de ser positivas algunas iniciativas innovadoras por imaginativas como el Programa de Acompañamiento Policial a Clientes Bancarios anunciado por el Ayuntamiento capitalino.

La Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Protección Ciudadana inició el programa de acompañamiento policial para brindar seguridad y el resguardo de su patrimonio a las y los usuarios de instituciones bancarias, al realizar movimientos con dinero en efectivo.

Sin ningún costo, la ciudadanía puede solicitar el acompañamiento de elementos de la Policía Municipal para acudir a una sucursal bancaria, ubicada en el municipio capitalino, a depositar o retirar recursos en efectivo para evitar ser víctimas de la delincuencia.

Para recibir las solicitudes, la Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Protección Ciudadana pone a disposición los números telefónicos 514 45 25 extensión 102 y 105 y 514 49 66. La persona que presente la necesidad también puede dirigirse al elemento más cercano para pedir el resguardo de su patrimonio.

Los elementos de la corporación, a bordo de una unidad de motor, realizarán el acompañamiento del usuario del banco al lugar a donde requiera trasladar el efectivo, siempre que comprenda la jurisdicción del municipio de Oaxaca de Juárez.

Cabe precisar que este servicio a la ciudadanía no es para el traslado de valores sino única y exclusivamente de acompañamiento a las personas para prevenir que sean víctimas de la delincuencia.

Es importante subrayar que de acuerdo con lo establecido por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, es responsabilidad de las instituciones financieras brindar en sus instalaciones seguridad a sus cuentahabientes y usuarios.

El Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, a través de la Dirección de Seguridad Pública, Vialidad y Protección Ciudadana, seguirá desplegando operativos de presencia para vigilar las 70 instituciones bancarias y 223 cajeros automáticos que existen en la cuidad capital.

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