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DETRÁS DE LA NOTICIA: El infierno temido de la militarización.

Opinión por Alfredo Martínez de Aguilar

* La crisis humanitaria en salud se agrava por el “austericidio”. Creíamos haber visto lo peor. Pero no, surgen nuevas sorpresas amenazantes. Andrés Manuel López Obrador impone la militarización. * Elementos de la Guardia Nacional llegaron al Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE para amedrentar al personal que exige la salida del Director Médico nacional Ramiro López Elizalde.

Dos “pestes negras” asolan a México. El coronavirus SARS-COV2-COVID-19. Y el nacionalpopulismo lopezobradorista. Ambas han sido alimentadas por décadas, por la corrupción de la partidocracia.

Los rubros más saqueados impunemente son el campo, la salud y la educación. Lo han sido desde hace un siglo por el PRIAN y, actualmente, por MORENA. Son sectores estratégicos y vulnerables.

La mayoría silenciosa de la ciudadanía es corresponsable. Por apatía e indiferencia, por cobardía y en muchos casos por abierta complicidad ha guardado silencio cómplice. El que calla otorga.

La crisis humanitaria en salud se agrava por el “austericidio”. Creíamos haber visto lo peor. Pero no, surgen nuevas sorpresas amenazantes. Andrés Manuel López Obrador impone la militarización

Lo hace a 17 meses en medio de la paralización de la producción y de la economía. Busca contener y reprimir la protesta social por las inconformidades populares. Es finalmente el objetivo oculto.

Elementos de la Guardia Nacional llegaron al Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE para amedrentar al personal que exige la salida del Director Médico nacional Ramiro López Elizalde.

Los trabajadores denuncian que el Director General del ISSSTE, Luis Antonio Ramírez Pineda, y el Director Médico, Ramiro López Elizalde, los dejan sin Equipo de Protección Preventiva (EPP).

El equipo de protección del COVID-19 comprende, caretas, guantes, googles, botas y overoles. En lugar de éstos, el Día Internacional de la Enfermería, envían a la Guardia Nacional, a intimidarles.

Los trabajadores del Hospital Regional Presidente Juárez del ISSSTE están sumamente indignados. Tras ser desconocido, en abierto desafío, el Director Jesús Gonzalo López Cruz regresó al hospital.

Llovieron críticas al senador del Movimiento de Regeneración Nacional Salomón Jara al felicitar en las redes sociales a las enfermeras en el Día Internacional de éstas. La @LagarrapataS22 tuiteó:

“Todo es discurso y simulación lejos de felicitarles debes exigir a @LuisAntoRamirez que te explique por qué manda a la @GN_MEXICO_ armados para amedrentar a las enfermeras y médicos que piden la destitución de los directivos del HRPJ, #Oaxaca. Eso es violencia criminal”.

“Por si necesitas más pruebas aquí están la @GN_MEXICO_ y Policias dentro del Hospital Presidente Juárez de @ISSSTE_mx #Oaxaca. @LuisAntoRamirez y @RamiroLopezE tienen a la Policía a su servicio para amedrentar al personal médico que exigen EPP para el #Covid19”.

Es la imposición de un gobierno tiránico. Es el modelo cubano-venezolano. Es el fiel cumplimiento del Foro de Sao Paulo. Es el perverso plan de conquista socialista-comunista en América Latina.

Sobreviene la quiebra de miles de empresas. Las Mipymes, micro, pequeñas y medianas, son las más afectadas. Traen consigo el desempleo de millones. El impacto en Oaxaca alcanza a miles.

Se suma la creciente inseguridad pública. La impunidad es escandalosa. Detona la espiral de brutal violencia en el país. Es inocultable el aumento de la danza macabra de la sangre y la muerte.

Los tres factores siembran de muertos el territorio nacional. Continúan los “levantones”, secuestros y ejecuciones. Lo mismo ocurre con los descuartizamientos y las desapariciones.

Persiste el elevado número de los feminicidios, las extorsiones y el cobro de piso. En los asaltos y robos con violencia participan elementos o ex elementos de las diversas corporaciones policíacas.

Como es lógico y natural el hartazgo genera inconformidad. Las protestas de cientos de miles no se hacen esperar contra inseguridad y violencia. Andrés Manuel les descalifica y llama “pirrurris”.

No vio ni oyó sus demandas de justicia como Jefe de Gobierno. Menos lo hace como Presidente de la República. Mantiene una actitud al mejor estilo de su archienemigo Carlos Salinas de Gortari.

Tampoco vio y menos recibió a las integrantes de #UnDíaSinMujeres. Rotundamente se negó a escuchar a millones de mujeres víctimas del odio machista y de la violencia de género en el país.

Es el huevo de la serpiente largamente larvado. México tuvo su punto de quiebre con la primera ola del nacionalpopulismo de Lázaro Cárdenas. El reparto agrario prohijó los votos cautivos verdes.

La producción agropecuaria inició su declive. Muchos años los ejidatarios no fueron propietarios de sus parcelas. Autoridades y representantes agrarios encontraron su mina de oro en los ejidos.

La segunda ola del populismo, con Luis Echeverría Álvarez, terminó de hundir al campo mexicano. Se fomentó la invasión de las unidades productivas. Se les satanizó como latifundios porfiristas.

Al mismo tiempo, se cerró la pinza sobre el pueblo bueno y sabio. Se destruyó la calidad de la instrucción laica, pública y gratuita. Se privatizaron todos los niveles, especialmente el superior.

Era la única opción para los hijos del pueblo. Las víctimas generacionales son los hijos de indígenas, campesinos, obreros y colonos pobres. El objetivo es egresar profesionales ineptos.

El objetivo es más que perverso: Evitar el fortalecimiento de la clase media y finalmente destruirla. Porque es la más dispuesta a defender sus derechos y la que tiene un patrimonio qué perder.

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