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DETRÁS DE LA NOTICIA: Comuna y FPR enfrentan a comunidades para lucrar

#Opinión  Alfredo Martínez de Aguilar

Los diversos sectores productivos de Oaxaca atraviesan una situación económica muy difícil como resultado de la revuelta magisterial que reeditó el conflicto de 2006 con consecuencias mucho más graves porque, ahora, se hizo extensivo a todo el Estado.

Los dirigentes de las diferentes cámaras y organismos empresariales estiman que las cuantiosas pérdidas ascienden a un monto alrededor de los 10 mil millones de pesos. ¡Imagínese, querido lector, un mundo de dinero que, lamentablemente, no se recuperará jamás!

La única actividad altamente redituable económica y políticamente y que continúa próspera y con viento en popa, es la industria del chantaje que realizan los más de 500 grupos de presión surgidos como hongos en tiempos de lluvia en las diversas regiones.

Es una cultura a la que los oaxaqueños  ya no podemos seguir respondiendo. Ya no podemos seguir con estas presiones y chantajes, reconoció con justa razón el ingeniero Carlos Santiago Carrasco, secretario general de Gobierno, responsable de la política interior del Estado.

Entre estos grupos de presión y chantaje destacan, preponderantemente, las organizaciones radicales Comuna, creada y manipulada por Flavio y su hermano Erick Sosa Villavicencio y el Frente Popular Revolucionario (FPR), dirigido por Macario Atalo Padilla.

Su mano negra que mece la cuna de la violencia aparece siniestramente en los conflictos que provocan para lucrar en numerosas comunidades y municipios al dividirles y enfrentarles con un saldo sangriento de muertos y heridos, como en el enfrentamiento de Nochixtlán.

Pero igual ha ocurrido en municipios de la zona chatina en la Sierra Sur como el conflicto entre San Mateo Yucutindoo, San Juan Quiahije y San José Ixtapan, así como el conflicto de Santiago Amoltepec con los municipios colindantes de Yucutindoo y Santiago Textitlán.

El conflicto mas reciente del que se responsabiliza al dirigente de Comuna, Flavio Sosa Villavicencio, es el de las comunidades de San Sebastián Nopalera y Zimatlán de Lázaro Cárdenas, en la región Mixteca, con el saldo de un muerto y tres heridos.

Este conflicto agrario ha sido atendido, incluso por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Está resuelto jurídicamente, pero no socialmente. La Secretaría General de Gobierno, las dependencias agrarias y la Secretaría de Gobernación buscan alcanzar acuerdos con éstos.

El titular de la SEGEGO, Carlos Santiago Carrasco, recordó que han realizado mesas de diálogo. El gobernador Gabino Cué firmó con ellos un convenio de no agresión y respeto,  pero lamentablemente las personas de San Sebastián Nopalera fueron quienes agredieron.

Considera que en los municipios involucrados en ambos conflictos agrarios, manipulados por el FPR y Comuna, podría suspenderse mañana la ceremonia de El Grito de Independencia, para evitar cualquier situación que pudiera poner en riesgo la integridad de las personas.

Aseguró que fuera de dos o tres municipios como los mencionados, a los que se sugiere que se tomen precauciones para que no se generen conflictos innecesarios, por supuesto, que habrá celebración de las Fiestas Patrias en el resto de los 570 municipios del Estado.

Hay riesgo en Amoltepec, donde recientemente se revocó el mandato de algunos regidores y eso puede generar situaciones que pongan en riesgo la celebración del acto o la integridad de algunas personas, pero de ahí en fuera, hay condiciones para que se realice la celebración.

Igual en Zimatlán de Lázaro Cárdenas, en la Mixteca, donde por un conflicto agrario recientemente hubo un incidente y podría darse la cancelación. Se toman las previsiones para evitar cualquier situación que pudiera poner en riesgo la integridad de las personas.

Para evitar que la delincuencia organizada ponga en riesgo la celebración de las Fiestas Patrias, se desplegarán en el Estado más de 5 mil elementos, en la capital vigilarán mil 500 y esperan que se integren los elementos de la Policía Federal y la Gendarmería Nacional.

Subrayó que todos los cuerpos de seguridad estarán atentos, para evitar al máximo acciones violentas. Se ha montado un operativo policíaco en la capital del estado para resguardar la seguridad de los visitantes y de quienes acudan al zócalo a presenciar El Grito.

Respecto de los focos rojos por la delincuencia organizada en el Istmo, recordó que se ha montado un operativo con la Policía Federal, la Estatal y la Fiscalía General del Estado. En los últimos días ya no se han dado los asesinatos que se venían registrando.

Confirmó que debido al efecto ‘cucaracha’ los delincuentes pasan al Istmo y la Cuenca donde se trabaja con la base de instalaciones mixtas. Hay un esfuerzo de coordinación y a partir de que se tomaron estas medidas la delincuencia ha disminuido.

Son 32 conflictos álgidos que merecen atención inmediata y 6, que están siendo atendidos por la mesa de atención agraria, la cual  que incluye a todas las dependencias estatales y federales, que tienen que ver con los temas agrarios. Es una mesa de atención especial.

Estos conflictos jurídicamente ya están resueltos, pero algunas comunidades no reconocen las resoluciones presidenciales que benefician a sus vecinos, por ejemplo, San Juan Quiahije tiene una resolución a su favor, sin embargo, San José Ixtapan no lo acepta. Ello genera el conflicto social.

Actores políticos intervienen en estos conflictos. Dirigentes del FPR asesoran a San José Ixtapan. Creemos que si hay voluntad por parte de estas organizaciones ayudaría a alcanzar  la gobernabilidad en el estado. Otro caso es el de Comuna, que asesora a San Sebastián Nopalera y Maurilio Santiago, a Zimatlán de Lázaro Cárdenas.  Dialogamos con ellos para que nos ayuden a dar una respuesta de paz.

“Trabajamos en coordinación con las distintas dependencias para dar respuesta a las peticiones de éstas.  Se manifestaron  la CODEDI,  OPIO,  UNTA que forma parte del COOA , que fueron atendidas por el Fiscal del Estado, debido a que sus planteamientos son de carácter jurídico”, afirmó Santiago Carrasco.

P.-  ¿Hay responsables?

R.- La Fiscalía del Estado  trabaja en este hecho y se van a castigar a los responsables.  Nosotros ya reforzamos la vigilancia. Lamentablemente este grupo actuó por la noche.

P.- ¿Cuántos conflictos agrarios hay en el estado y los que son álgidos, como el de San Sebastián Nopalera?

R.-Son  32 conflictos  álgidos que merecen atención inmediata y 6,  como el de San Sebastián Nopalera.  Está  Santiago Amoltepec  con dos de los municipios colindantes;  Yucutindo, San Juan Quiahije y San José  Ixtapan,   que están siendo atendidos por la mesa de atención agraria, la cual  que incluye a todas las dependencias – estatales y federales –,  que tienen que ver con los temas agrarios.  Es una mesa de atención especial que todos los días está revisando los temas .

P.- ¿Por qué no han sido resueltos, por falta de recursos o voluntad?

R.- Estos conflictos jurídicamente ya están resueltos, solo que una comunidades no reconoce las resoluciones presidenciales que benefician a sus vecinos, por ejemplo  San Juan Quiahije  tiene una resolución  a su favor, sin embargo, San José Ixtapam no lo acepta. Eso es lo que genera el conflicto social.

P.- ¿Hay actores políticos que están interviniendo en estos conflictos?

R.- Por supuesto. Hay asesores del FPR que asesoran a San José Ixtapam  y creemos que si hay voluntad por parte de las organizaciones eso nos ayudaría a alcanzar  la gobernabilidad en el estado. Otro caso es el de Comuna, que asesora a San Sebastián Nopalera  y Maurilio Santiago, a Zimatlán de Lázaro Cárdenas.  Estamos dialogando con ellos para que nos ayuden a dar una respuesta de paz.

P.- ¿Se puede pensar que las organizaciones están administrando los conflictos?

R.- No. Nosotros  tenemos que hacer un esfuerzo con las comunidades para que acepten las resoluciones. Si embargo, no nos permiten nada, ni  entrar a realizar las mediciones para ver qué parte les corresponde y cuál no. Nuestra obligación es continuar con el  proceso de diálogo para que las comunidades  acepten las resoluciones .  Buscamos por todos los medios convencerlos.

El año pasado la Secretaría de Desarrollo Urbano, Territorial y Agrario (SEDATU) creó el Programa de Atención a Conflictos Sociales en el Medio Rural (COSOMER),   mediante el cual destinaron mil millones de pesos, los cuales  estaban a disposición de aquellas personas  que son dueños de una extensión pero no las tienen en posesión, les ofrecieron algunas contra prestaciones.  A ellos se les pidió que aceptaran el dinero,  lamentablemente no quieren,  ellos dicen “yo no quiero dinero, quiero el terreno”. De ese recurso no se usaron ni 300 millones.

P.- ¿Son responsables las organizaciones?

R.- Ambos,  por una parte es la voluntad de las comunidades y por la otra las organizaciones  se negaron. En cierta forma les conviene mantener vivos estos conflictos.

5155663 Esteban Baca Manzana M No. 1, 5ª Etapa INFONAVIT 1º. DE MAYO

La corrupción corrompió a los corruptos. Hoy, los gobernantes, servidores públicos y la mayoría de los políticos, salvo cada menos honrosas excepciones, saquean sin límites ni llenadera alguna los recursos públicos.

Y, lo peor, de todo es que tienen garantizada la impunidad total porque la legislación así lo permite, gracias a sus amplísimas redes de complicidad. En Oaxaca dejó de ser delito grave el peculado, es decir, el robo del dinero del pueblo.

Aquí radica la trascendencia histórica de reinventar la política, pero sobre todo de reconstruirla para construir ciudadanía informada, consciente, responsable, para ser libre de pensamiento y acción. Dispuesta a defender su vida, libertad y dignidad hasta con la vida si es necesario.

Agradezco a Dios, a la vida y a ustedes su amistad y su presencia. Agradezco la oportunidad de compartir con ustedes algunas reflexiones.

Reinventar la política es redescubrirla e imprimirle nuestro sello personal, pero también es reconstruirla y es lo que ha hecho nuestro querido amigo Marcelino Miranda Añorve en su libro ‘La reinvención de la política’.

En un escenario terriblemente catastrófico como el que vive México todo, pero de manera especial el que flagela a Oaxaca, la Nueva Antequera, la Gran Señora del Sur, nunca como ahora es más que oportuno buscar salidas a la crisis, a través de la luz del conocimiento.

En Oaxaca, no sólo se mide el éxito o fracaso de la Reforma Educativa, porque la base más amplia de la CNTE es la Sección XXII, sino sobre todo desde Oaxaca resurge la Disputa por el Rumbo de la Nación entre el neoliberalismo capitalista y el populismo socialista.

El caos nacional, jamás se entenderá en su exacta dimensión si no lo analizamos a la luz de la prefabricada crisis educativa. Sin educación, no hay democracia ni desarrollo ni menos justicia social.

Sin los principios y valores universales de búsqueda y defensa de la verdad y de la justicia, no hay dignidad como persona ni menos como ciudadano.

Y, hoy más que nunca, el pueblo de México y Oaxaca tiene hambre y sed de justicia, pero también hambre y sed físicas. ¡Cuidado! Las revoluciones en el mundo estallan por hambre.

¿En qué momento, cuándo, cómo y por qué Oaxaca y México todo perdió el sano y positivo rumbo del crecimiento, desarrollo material y progreso espiritual?

Cuando por cobardía o complicidad permitimos que se destruyera, primeramente la educación media superior y superior, al entregar las universidades públicas a la guerrilla, al porrismo y actualmente al narcomenudismo.

En última instancia, a la corrupción rampante que ha privatizado la educación pública, laica y gratuita al traficar con la venta de las fichas de ingreso a las facultades y escuelas universitarias.

Cuando permitimos la prostitución del sindicalismo y de los catedráticos con la venta de calificaciones con dinero o botellas de alcohol o bien, a través del acoso, no sólo femenino, sino incluso masculino.

Pero también permitimos por cobardía o complicidad la destrucción de la educación básica, preescolar, primaria y secundaria, al erigirse la Sección XXII de la CNTE de manera aberrante en patrón y sindicato.

Tenemos un Estado fallido federal y localmente, porque estamos fallando como personas, como ciudadanos, como familia y como sociedad.

La corrupción corrompió a los corruptos. Hoy, los gobernantes, servidores públicos y la mayoría de los políticos, salvo cada menos honrosas excepciones, saquean sin límites ni llenadera alguna.

Y, lo peor, de todo es que tienen garantizada la impunidad total porque la legislación así lo permite, gracias a sus amplísimas redes de complicidad.

Aquí radica la trascendencia histórica de reinventar la política, pero sobre todo de reconstruirla para construir ciudadanía informada, consciente, responsable, para ser libre de pensamiento y acción. Dispuesta a defender su vida, libertad y dignidad hasta con la vida si es necesario.

La piedra angular para reinventar y reconstruir la política es, a nuestro juicio, salvo su mejor opinión, terminar con la corrupción e impunidad en México y Oaxaca. Si no sumamos la acción a la palabra ésta deja de tener sentido de vida.

Y es así porque, lamentable y dolorosamente, la anarquía, es decir, la violación continúa y permanente del Estado de Derecho y de las leyes que de éste emanan, permitimos que se convirtiera en la principal fuente de riqueza mal habida en el país, desde los más altos niveles de los diversos órdenes de gobierno y desde las cúpulas que manipulan a la partidocracia.

Si el conocimiento no se encarna y aterriza en la realidad deja de tener razón de ser; de ahí que permítaseme hacer un ejercicio de creación de escenarios políticos futuros.

Si al iniciar su gobierno Alejandro Murat Hinojosa no arranca con el combate a la corrupción y legitima su ejercicio del poder metiendo a la cárcel a dos o tres pillos del para entonces reciente pasado, condenará al más rotundo fracaso su ambiciosa meta de hacer realidad El Milagro Oaxaqueño.

La medida del éxito o fracaso de su esperanzadora administración, ahora sí de cambio, será pues el combate a la corrupción. Para lograrlo tiene a su favor llegar al gobierno con un enorme bono democrático, representado por el triunfo indiscutible por más de 128 mil votos.

También tiene a su favor el gran bono demográfico de su juventud, caracterizada por la madurez del trabajo con resultados a nivel estatal y federal. Alejandro Murat Hinojosa, político inteligente y preparado académicamente a nivel internacional, no tiene derecho a fallar a los oaxaqueños.

El juicio de la historia será implacable con él, sino gobierna con visión y sensibilidad de estadista, como lo reclama Oaxaca y México todo. Si lo hace será la plataforma que lo catapulte a mayores responsabilidades nacionales a mediano plazo.

Como todo parece indicarlo, de gran ayuda será el invaluable apoyo de María de las Nieves García Fernández, desde el liderazgo de la LXIII Legislatura del Congreso del Estado, así como de Celestinos Alonso Álvarez desde la Secretaría General de Gobierno, responsable de la política interior del Estado.

En este sentido, tampoco tiene derecho a fallar a los oaxaqueños del municipio capitalino José Antonio Hernández Fraguas. Échate ese trompo a la uña. Convirtamos a Oaxaca en una ciudad limpia, sin graffiti y sin baches. Vendamos esa imagen al turismo nacional y extranjero, Toño.

Es ocasión propicia, como lo propone en su libro Marcelino Miranda Añorve, convocar a un nuevo Pacto Social a todos los sectores mexicanos y oaxaqueños.

Urge a Oaxaca un Nuevo Pacto Social, un Reencuentro de los oaxaqueños, un gran Acuerdo de Gobernabilidad para el Desarrollo con Justicia, con el firme propósito de garantizar la gobernanza y la gobernabilidad.

Mucho ayudará a ello decretar una Ley de Amnistía para liberar a los actores políticos que no hayan cometido delitos graves, como lo prevé en una de sus primeras acciones al inicio de su gobierno Alejandro Murat Hinojosa.

Indispensable es hacer un llamado a la inteligencia y mexicanidad de los jefes de las bandas del crimen organizado y a los capos de los cárteles del narcotráfico para frenar la brutal violencia.

¡No calienten la plaza! Porque en la guerra todos perdemos, sobre todo los inocentes, que están en el lugar y hora equivocados.

Igual llamado hacemos a los grupos guerrilleros. La lucha armada está condenada al más rotundo fracaso. Necesitamos vivos a sus milicianos luchando por la justicia social por la vía legal y pacífica. ¡México y Oaxaca no necesitan más muertos!

A unos y a otros les exigimos: ¡No hagan el juego al imperialismo yanqui y a sus cómplices en México y Oaxaca, porque al final éstos serán los únicos ganones!

Mucho daño nos ha hecho como nación la mentira y la simulación. Exijamos congruencia en el cumplimiento de los compromisos de campaña. Sólo de esta manera lograremos, pueblo y gobierno, reinventar y reconstruir la política.

(Palabras del Lic. Alfredo Martínez de Aguilar, presidente del Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores A.C., Capítulo Oaxaca, durante la Presentación del libro ‘Reinventando la Política’ del Lic. Marcelino Miranda Añorve, en la Biblioteca Francisco de Burgoa del Centro Cultural Santo Domingo. Oaxaca de Juárez, Oaxaca, 8 de Septiembre de 2016).

La reinvención de la política y el Foro Nacional de Periodistas

Septiembre 11, 2016 – 14:25

En un escenario terriblemente catastrófico como el que vive México todo, pero de manera especial el que flagela a Oaxaca, la Nueva Antequera, la Gran Señora del Sur, nunca como ahora es más que oportuno buscar salidas a la crisis, a través de la luz del conocimiento.

Escribir el libro ‘La política y el juego del poder’ en 2011 y, ahora, cinco años después ‘La reinvención de la política’, no sería posible sin el sólido bagaje cultural que ha brindado la historia política universal y de México a nuestro amigo Marcelino Miranda Añorve.

Nobleza obliga. Agradezco la oportunidad de compartir algunas reflexiones por la publicación y presentación de su segunda obra política, en el marco del Primer Aniversario de la fundación del Foro Nacional de Periodistas y Comunicadores, Capítulo Oaxaca, que me honro en presidir.

Saludo con respeto y admiración a mis amigos y compañeros comentaristas, doctora María de las Nieves García Fernández, inteligente y hermosa mujer, y al maestro Isidoro Yescas Martínez, acucioso investigador de la real politik oaxaqueña.

Oriundo de Ometepec en la región de la Costa Chica de Guerrero, Marcelino es licenciado en Derecho, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuyo lema ‘Por mi raza hablará el espíritu’, es legado eterno del oaxaqueño José Vasconcelos, Maestro de América.

Marcelino es analista con amplia experiencia político-administrativa en su tierra natal, así como a nivel federal y de liderazgo sindical nacional, diputado local y federal, que le ha permitido conocer el manejo de las negociaciones políticas y adquirir una gran experiencia en la solución de conflictos.

Reinventar la política va de la mano de manera obligada con la imperiosa necesidad de reconstruir la política. Conseguirlo pasa, obligadamente, por cimentar el ejercicio del gobierno en la gobernanza y la gobernabilidad.

Pero éstas dos cualidades de la normalidad democrática, necesariamente pasan, asimismo, por la construcción de ciudadanía, porque si bien es cierto que los pueblos tienen los gobiernos que merecen, los gobiernos también tienen los ciudadanos que merecen.

La apatía y cobardía de la mayoría de los oaxaqueños para exigir respeto a sus derechos con dignidad y valentía, es claro ejemplo de ello.

La piedra angular para reinventar y reconstruir la política es, a nuestro juicio, salvo su mejor opinión, terminar con la corrupción e impunidad en México y Oaxaca.

Y es así porque, lamentable y dolorosamente, la anarquía, es decir, la violación continúa y permanente del Estado de Derecho y de las leyes que de éste emanan, permitimos que se convirtiera en la principal fuente de riqueza mal habida en el país, desde los más altos niveles de los diversos órdenes de gobierno y desde las cúpulas que manipulan a la partidocracia.

Si el conocimiento no se encarna y aterriza en la realidad deja de tener sentido de trascendencia; de ahí que permítaseme hacer un ejercicio de creación de escenarios políticos futuros.

Si al iniciar su gobierno Alejandro Murat Hinojosa no arranca con el combate a la corrupción y legitima su ejercicio del poder metiendo a la cárcel a dos o tres pillos del para entonces reciente pasado, condenará al más rotundo fracaso su ambiciosa meta de hacer realidad El Milagro Oaxaqueño.

La medida del éxito o fracaso de su esperanzadora administración, ahora sí de cambio, será pues el combate a la corrupción. Para lograrlo tiene a su favor llegar al gobierno con un enorme bono democrático, representado por el triunfo indiscutible por más de 128 mil votos.

También tiene a su favor el gran bono demográfico de su juventud, caracterizada por la madurez del trabajo con resultados a nivel estatal y federal. Alejandro Murat Hinojosa, político inteligente y preparado académicamente a nivel internacional, no tiene derecho a fallar a los oaxaqueños.

El juicio de la historia será implacable con él, sino gobierna con visión y sensibilidad de estadista, como lo reclama Oaxaca y México todo. Si lo hace será la plataforma que lo catapulte a mayores responsabilidades nacionales a mediano plazo.

Como todo parece indicarlo, de gran ayuda será el invaluable apoyo de la doctora María de las Nieves García Fernández, futura lideresa de la LXIII Legislatura del Congreso del Estado, así como del licenciado Celestinos Alonso Álvarez desde la Secretaría General de Gobierno, responsable de la política interior del Estado.

En este sentido, tampoco tiene derecho a fallar a los oaxaqueños del municipio capitalino el licenciado José Antonio Hernández Fraguas. Échate ese trompo a la uña, Toño.

Sin ser estrictamente un libro de bolsillo bien podemos calificar la obra ‘La reinvención de la política’ de Manual o Guía del Buen Gobierno, a partir de la indispensable Reinvención de la Política y la Tarea de Gobernar, dada la creciente desaprobación del desempeño de los gobernadores, legisladores, jueces y magistrados del Poder Judicial y presidentes municipales.

Urge, pues construir gobiernos estatales y municipales caracterizados por las tres “E”, eficaces, eficientes y efectivos, para redignificar la política y la administración pública y reivindicarse con sus gobernados.

La reinvención requiere de manera indispensable de gobernanza y gobernabilidad, a fin de retomar los fines y funciones del Estado y cumplir con la obligación de los gobiernos estatales o municipales de servir a la sociedad y asegurar la convivencia pacífica, para alcanzar un desarrollo con justicia y paz social.

La reinvención de la política, a través de la gobernanza y gobernabilidad demanda diálogo permanente e incluyente con todos los sectores sociales, y acciones de prevención, mediante la elaboración de una Agenda de Riesgos que defina y precise los focos amarillos y rojos a los cuales prestar atención prioritaria.

Ello requiere acciones de gobierno extraordinarias, golpes de audacia y hasta temeridad responsable, y desempeño excelente del equipo de trabajo, lo que obliga a una rigurosa selección del perfil de los colaboradores.

A grandes males, grandes remedios. Lograr la solución de todos los problemas y conflictos sólo es posible bajo el respeto irrestricto del Estado de Derecho haciendo caer todo el peso de la Ley a quienes la violen. No se trata de reprimir que quede claro. No llamamos a la violencia institucional. No nos confundamos. Todo dentro de la Ley, nada fuera de la Ley.

Sólo el imperio soberano de la Ley, sin privilegio alguno, sin aplicación selectiva ni instrumento de venganza política, puede salvar a México y a Oaxaca, como lo han demostrado a lo largo de la historia los distinguidos oaxaqueños que han contribuido a construir este país.

El gran reto a corto y mediano plazo es fortalecer el carácter democrático de México, porque hoy vivimos en un Estado de Derecho no del todo democrático. Urge pasar de la democracia meramente representativa a la democracia participativa.

Los gobernantes estatales o municipales deben tener un claro y firme liderazgo, con visión y sensibilidad de estadista, mediante el ejercicio correcto, adecuado y oportuno del poder. Y para conseguirlo nada mejor que saber escuchar.

Lo primero es tener un propósito definido, para saber qué quiero y a dónde voy; tener estrategia, saber cómo lograrlo. Tener método al contar con el know how, saber cómo hacerlo.

Urge a Oaxaca un Nuevo Pacto Social, un Reencuentro de los oaxaqueños, un gran Acuerdo de Gobernabilidad para el Desarrollo con Justicia, con el firme propósito de garantizar la gobernanza y la gobernabilidad.

Mucho ayudará a ello decretar una Ley de Amnistía para liberar a los actores políticos que no hayan cometido delitos graves, como lo prevé en una de sus primeras acciones al inicio de su gobierno Alejandro Murat Hinojosa.

Mucho daño nos ha hecho como nación la mentira y la simulación. Exijamos congruencia en el cumplimiento de los compromisos de campaña. Sólo de esta manera lograremos, pueblo y gobierno, reinventar y reconstruir la política.

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