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Por Rosy RAMALES
Es probable la falsedad del contenido del video circulado la noche de este jueves donde se evidencian supuestas transacciones para financiar la campaña del panista Ricardo Anaya Cortés a la Presidencia de la República. Sin embargo, Juan Barreiro aparece de carne y hueso.
¿Qué, es un montaje? ¿Le doblaron la voz? ¿O lo obligaron a realizar la grabación entre él y una supuesta empresaria argentina donde platica detalladamente operaciones entre su hermano Manuel Barreiro y el hoy candidato presidencial de la coalición “Por México al Frente” (PAN-PRD-PT)?
Lo que sí queda claro con este nuevo escándalo es que no habrá voto útil priista para Ricardo Anaya, pues ¿cómo favorecer a quien responsabiliza al presidente Enrique Peña Nieto del nuevo “ataque” en su contra por advertir con enviarlo a la cárcel si gana la elección, y con tener un supuesto pacto con AMLO para el triunfo de éste?
En todo caso, extraño pacto ¿no? Andrés Manuel López Obrador se ha pasado más de 12 años advirtiendo en acabar con la corrupción de la “mafia del poder” y enviar a prisión a todo ex funcionario corrupto, ¿y ahora no lo hará en aras de evitar cualquier problema en torno a su victoria del próximo primero de julio?
O sea, ¿AMLO otorgará el perdón a Peña Nieto?
En política todo es posible; incluso, los acuerdos más insospechados e inconfesables. Siempre es como dicen: “El fin justifica los medios”.
En nuestro país ha sido costumbre política el “acuerdo” entre el mandatario saliente y el puntero de las encuestas electorales para sucederlo en la Presidencia de la República o, en su caso, con el candidato que le garantice impunidad.
Más o menos así ocurrió cuando en el 2000 el PAN ganó la elección con Vicente Fox Quezada, quien, por cierto, generó tantas esperanzas de cambio en el país como ahora las ha sembrado López Obrador como candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” (Morena-PT-PES).
Incluso, en el 2006, sin estar en el poder, el PRI ayudó a Felipe Calderón Hinojosa para convertirse en el segundo panista en la Presidencia de México…bueno, más bien para evitar el triunfo de AMLO.
¿Cómo entonces ahora ayudarlo? Bueno, es probable; si Peña Nieto ya tiene la certeza del eventual triunfo del tabasqueño, pactará con él de algún modo para nunca pisar la cárcel, aun cuando tenga que renunciar a la pensión vitalicia de cinco millones de pesos mensuales que AMLO promete eliminar.
Sin embargo, también es probable otro escenario: Que la cúpula priista realmente tenga como estrategia terminar de ubicar a José Antonio Meade Kuribreña como el candidato presidencial en segundo sitio para mover hacia él todo el voto útil de los indecisos, que sumados a determinado porcentaje de voto oculto podrían hacer la diferencia entre perder y ganar.
Además pasa algo que ni los bots de Twitter, ni las encuestas alcanzan a detectar: El miedo de cierto porcentaje de electores a votar por AMLO, y que no son empresarios, sino personas comunes y corrientes de clase media.
Es incierta la realidad de Meade: Quien sabe cuanto sea su porcentaje de bots, su ubicación exacta en el ánimo de los electores en relación a las encuestas y su aceptación en el priismo en principio enojado por la postulación de un externo a la Presidencia de la República en vez de un orgánico.
No obstante la incertidumbre, tampoco es descabellada la estrategia para llevarlo al segundo sitio y mover a su favor el voto útil.
Una estrategia en ese sentido justificaría la aparición del video donde el hermano del empresario queretano da detalles de los negocios para favorecer la campaña de Ricardo Anaya, con cuyo triunfo tendrían lo que quisieran, serían “al cielo”.
La historia de lavado de dinero, perseguirá a Anaya hasta el final de la elección, y quizá hasta después de ésta. Por lo pronto, otro golpe en su contra en la víspera comicial no es casual. Además, Ricardo continúa sin la aprobación de los panistas del equipo de Margarita Zavala.
EUFROSINA
Para muestra un botón más. En el estado de Oaxaca, la diputada local panista Eufrosina Cruz Mendoza, ícono de la lucha a favor de los derechos político electorales de las mujeres indígenas y leal seguidora de Margarita Zavala, se acaba de sumar a José Antonio Meade Kuribreña, candidato presidencial de la coalición “Todos por México” (PRI-PVEM-Panal).
Pero aclaró que se suma a Meade, no al partido que lo postula. Y su adhesión, dijo, es por amor a México.
