Igavec Noticias Noticias Oaxaca
Opinión Por: Rosy RAMALES
Hoy el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) designa a las consejeras y consejeros electorales de los 32 Consejos Locales, y en algunos casos ratificará a quienes han fungido como tales en dos Procesos Electorales Federales. Ojalá no se equivoque porque tomarán y ejecutarán decisiones en el proceso electivo que promete ser el más complejo en la historia electoral en nuestro país.
Por supuesto, no solamente por la elección de Presidente de la República, sino porque por primera vez concurren 30 comicios locales, en cuyos procesos el INE ejerce atribuciones , incluso en aspectos fundamentales como es la integración de las Mesas Directivas de Casilla y la capacitación de los funcionarios de las mismas; tareas que demandan la atención de los Consejos Locales sobre las actuaciones de los Consejos Distritales.
Todo es un engranaje y ante tanta elección, que representan una fuerte carga política, pues el INE requiere de órganos desconcentrados que efectivamente ayuden en la organización y preparación y desarrollo de las elecciones; el Instituto debe velar por garantizar la celebración de los comicios, no al contrario.
Recuerdo nítidamente el momento más álgido de la primera etapa del proceso electoral 2014-2015 para las elecciones de diputados federales, cuando los maestros de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) emprendieron una serie de acciones violentas con el ánimo de reventarlas en el Estado de Oaxaca.
Y en la mesa del Consejo Local del INE, hubo consejeros y consejeras que planteaban de manera vehemente cancelar las elecciones; es más hasta enviaron un oficio al Consejo General exponiendo argumentos como la falta de condiciones de seguridad tanto para los funcionarios electorales como para los electores, así como para los partidos y candidatos a cargos de elección popular.
Curiosamente, el planteamiento coincidía con la petición beligerante de la Sección 22.
La insistencia hizo dudar a las consejeras y consejeros electorales del Consejo General INE. Pero al final tomaron la decisión de correr el riesgo de celebrar la jornada electoral en el estado de Oaxaca, donde a pesar de las dificultades políticas el personal operativo tenía todo listo; la jornada se celebró y la Sección 22 y sus promotores políticos se quedaron con las ganas de ver el caos en el estado de Oaxaca.
Por cierto, el Consejo Local del Instituto hasta quedó dividido entre quienes de cierto modo coincidían con la demanda de la Sección 22 de cancelar las elecciones y quienes sostenían lo contrario.
En el Proceso Electoral 2014-2015 se llevaron a cabo las elecciones federales intermedias de diputados al Congreso de la Unión. Y entonces hubo comicios concurrentes en 17 entidades federativas a distintos cargos de elección popular; en Oaxaca solo hubo federales.
Pero en el 2018 en Oaxaca habrá elecciones concurrentes, igual que en 30 entidades federativas más. ¿Se imaginan la carga para el INE en el ámbito de su competencia y atribuciones? ¿Imaginen que a la Sección 22 nuevamente se le ocurra emprender sus acciones de boicot en aquellos estados donde la CENTE tiene presencia, como, por ejemplo, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Michoacán.
Evidentemente, irían en contra de todas las elecciones. O ahora puede ocurrir al revés, que el operador de un boicot provenga de intereses distintos a los de la CNTE y de la izquierda radical en nuestro país.
En fin, que para las necesidades políticas, democráticas, de paz y estabilidad, el INE tiene la obligación de integrar Consejos Locales con mujeres y hombres con conocimientos en materia electoral, pero sin cargas emocionales o políticas que en algún momento se inclinen hacia determinados intereses distintos a los principios democráticos.
A ver cómo queda la integración, porque anoche mismo estaba duro el jaloneo entre los partidos políticos que intentaban incidir en el ánimo de las consejeras y consejeros del INE para colocar incondicionales en las consejerías locales.
Y lo peor, en la lista previa de propuestas, se encuentran nombres de personas que ya han demostrado su falta de compromiso democrático en su desempeño anterior como consejeros y consejeras de los mismos Consejos Locales o en consejos de OPLES, y aún así figuran en las fórmulas para la integración de los órganos desconcentrados locales del INE; incluidas personas que han formado parte del Servicio Profesional Electoral.
Vienen propuestas de personas que han figurado en las consejerías de los Consejos Locales desde el 2012, y que ya no podrían desempeñar el cargo.
Después no lo lamenten la integración cuando el INE tenga el problema encima.
Y si los partidos políticos opinan, por lo menos que opinen sobre personas que garanticen la estabilidad en las entidades federativas y, por ende, contribuya a la estabilidad de todo México.
Correo: rosyrama@hotmail.com
Rosy RAMALES
