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#Opinión Por:Rosy RAMALES
*.- Delegaciones y operadores políticos
La gente subió a la celebración de la Guelaguetza, en el primer Lunes del Cerro. Visitantes extranjeros, nacionales y provenientes del interior de la entidad, así como habitantes de la capital oaxaqueña y municipios conurbados, abarrotaron el auditorio, desdeñando la amenaza de boicot de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Ahí estuvieron los mentores, en inmediaciones del Monumento a la Madre, amenazantes. Sin embargo, a la gente no le importó. Y sin enfrentarse a ellos, subió al Cerro del Fortín para presenciar los bailes, sones y las danzas de las delegaciones éticas provenientes de las ocho regiones del la entidad, que una vez más arrancaron aplausos, vítores y asombro a los asistentes.
Ni duda cabe, la Guelaguetza encierra magia. Y en esta ocasión fue una lección de unidad y de civilidad frente a la Sección 22 de la CNTE. Y ojalá los agremiados de esta gremial entiendan que la máxima festividad de los oaxaqueños está por encima de sus exigencias y amenazas. Y podrán amenazar, pero no se atreverán a enfrentarse cara a cara con el pueblo.
El pueblo por su parte entiende la lucha magisterial, pero no entiende su agresión sistemática al mismo pueblo: A su economía, a su fiesta, a su paz.
LOS OPERADORES
Evidentemente, además de la postura ciudadana frente la Sección 22, funcionaron los buenos oficios de los operadores políticos. Días antes, el mismo gobernador Alejandro Murat Hinojosa encabezó una mesa de trabajo con la dirigencia sindical, la cual puso a consideración de su Asamblea Estatal lo convenido con el mandatario, pero decidieron continuar con sus acciones de boicot.
No obstante, seguramente algo se pactó. Y que bueno, por el bien de Oaxaca, y mientras no sean carretadas de dinero que buena fala le hace a las comunidades y que no solucionan el fondo del conflicto magisterial, de cuyas movilizaciones la ciudadanía está verdaderamente harta.
El Secretario General de Gobierno, Héctor Anuar Mafud Mafud, con su experiencia y su equipo de colaboradores, incluyendo Subsecretarios, ha sido clave para mantener la relativa calma en Oaxaca. Los mentores pudieron haber hecho desmanes mayores, pero no los hicieron, quizá porque se han percatado del hartazgo ciudadano, de que la Guelaguetza está por encima de sus exigencias, y también porque intervinieron los operadores políticos.
Los adversarios, sobre todo internos, de Héctor Anuar Mafud lo critican. Pero no dan la cara. Y tampoco tendrían estatura para conducir la política interna en una entidad tan compleja como Oaxaca.
Además, Mafud es un punto de equilibrio porque no anda de protagónico, ni usando la Secretaría para hacer proselitismo político-electoral en beneficio propio.
LAS DELEGACIONES
Definitivamente, la Delegación de Tuxtepec con su Flor de Piña sigue cautivando tanto a oaxaqueños como a turistas nacionales y extranjeros. La gente se puso de pie para aplaudirle.
San Pablo Macuiltianguis con el Torito Serrano fue otra Delegación ovacionada. Lo mismo que Ejutla de Crespo con su Jarabe Ejuteco y la Culebra; Zaachila con la Danza de la Pluma, Pochutla con sus chilenas, las Chinas Oaxaqueñas y el Jarabe del Valle, Tlaxiaco con sus sones y jarabes, Santiago Niltepec y Putla Villa de Guerrero.
Nos referimos solamente a las Delegaciones que se presentaron en la edición matutina de la Guelaguetza en el primer Lunes del Cerro.
Ah, pero qué decepción con la Delegación de Juchitán de Zaragoza. ¡Llevó marimba! ¿qué no la marimba es tradicional de Chiapas? Además bailaron de manera muy común. ¿Y por eso hicieron tanto escándalo cuando las autoridades correspondientes informaron que no participaría en la Guelaguetza?
Las autoridades organizadoras de la máxima festividad de los oaxaqueños deberán tener más cuidado en no cargar el programa con delegaciones cuyos bailes son muy parecidos. Eso de poner dos delegaciones del Istmo es exagerado cuando el vestuario y los bailes son muy parecidos. Claro, en la edición matutina estuvo mucho mejor la Delegación de Niltepec.
Tampoco tiene mucho atractivo presentar dos delegaciones de la Cuenca del Papaloapan. Por ejemplo, Usila ya está considerada dentro de Flor de Piña, entonces por qué cansar al público.
En cambio hizo falta el Jarabe Mixteco de la Delegación de Huajuapan de León.
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