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- Parece que no
Por Rosy RAMALES
Al virtual Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, le salió el “primer morenista” del país. Ja. Como en la praxis del longevo PRI, donde al mandatario emanado de sus filas lo llaman el “primer priista”. ¡El origen no se olvida, y hasta se refina!
Erigido en el “jefe político” de Morena, AMLO sale en defensa de su partido por la sanción de 197 millones 46 mil 413 pesos impuesta por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) “por la constitución de un fideicomiso para allegarse de recursos como un mecanismo de financiamiento alterno a las reglas establecidas respecto al financiamiento privado en la ley”.
Ya lo preguntábamos en ocasión anterior: ¿Morena será un apéndice del Ejecutivo Federal? ¿López Obrador conducirá el país al mismo tiempo de fungir como presidente de facto del Comité Nacional del partido? Parece que por ahí va la cosa. ¿O no?
Vaya, en todo caso el reclamo al INE debió salir de la presidenta formal del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Yeidckol Polevnsky Gurwitz, que es muy buena para amenazar con soltar al “diablo”.
Por cierto, ella era la Secretaria General del partido y asume la presidencia cuando AMLO renuncia a la misma para solicitar su registro como precandidato a la Presidencia de la República. O sea, ¡Yeidckol sube por prelación…como en el PRI! Bueno, casi todos los partidos tienen la misma figura.
En fin, que López Obrador debe de comportarse como el virtual Presidente Electo en vez de líder de facto de Morena. Se ve tan mal haciendo el numerito de defensa del partido que hasta genera sospechas sobre el famoso fideicomiso “Por los demás”, supuestamente de ayuda a damnificados por los sismos de septiembre del 2017.
¿COMPRARON CONCIENCIAS?
Y también desata dudas sobre la legitimidad de los votos obtenidos por Morena en las elecciones concurrentes del pasado 01 de julio. Claro, la ciudadanía estaba harta del PRI, pero el dinero facilita muchas cosas, como la manipulación de conciencias, aun cuando la entrega de beneficios tenga una causa justa.
¿Cuántas conciencias se pudieron haber “comprado” o “convencido” para votar a favor de los candidatos de Morena con 78.8 millones de pesos? Aunque el fideicomiso no haya sido creado con fines electorales. Pero ¿qué puede pensarse cuando se crea justo cuando arrancó el Proceso Electoral 2017-2018; en septiembre?
Vaya, los sismos le vinieron como anillo al dedo a Morena. Además, eso de lucrar política y electoralmente con el dolor ajeno no tiene nombre. Todos los partidos políticos se aprovecharon de la tragedia para hacer proselitismo, y el partido de AMLO no fue la excepción cuando debió serlo haciendo honor al principio de honestidad enarbolado por el candidato presidencial.
El 26 de septiembre del 2017, siendo aun presidente nacional de Morena anunció la constitución del fideicomiso “Por los demás” para apoyar a alrededor de 45 mil damnificados de las entidades afectadas por los sismos Oaxaca, Chiapas, Morelos, Puebla y la Ciudad de México.
Para ello, según refirió en ese momento, Morena destinaría 103 millones de pesos. Incluso, dijo que parte del financiamiento público que el Estado otorga al partido mediante el INE, sería para ese fin, lo cual no está permitido por la ley, pues dicha prerrogativa es para actividades ordinarias y en proceso electoral hay un financiamiento adicional para campañas.
Desde ahí debió frenarlo el INE, quizá emitiendo una advertencia en general, porque la institución también está algo acotada. Mmmm, aunque ahora el procedimiento de fiscalización es más rápido. Ahí sí como que el Consejo General se tardó en pronunciarse sobre la fiscalización de los ingresos y egresos de Morena.
La constitución de fideicomisos es legal; es una forma prevista en la ley en la modalidad del financiamiento privado. Pero lo que está fuera de la norma, son las fuentes que le inyectaron recursos: Morena, personas morales, entes desconocidos. Ups.
EL MECANISMO ALTERNO
Que si el INE hubiera dado a conocer las irregularidades, quien sabe si el resultado hubiera sido tan contundente. Aunque de todos modos hubiese ganado AMLO porque la ciudadanía no quería otra cosa que sacar al PRI de la Presidencia de la República, cansada de la corrupción.
Y miren con lo que ahora se encuentran: Corrupción en la conformación, manejo y fin de ese fideicomiso “Por los demás”, constituido por Morena “para allegarse de recursos como un mecanismo de financiamiento alterno a las reglas establecidas respecto al financiamiento privado en la ley.”
El INE precisó: “Al fideicomiso ingresaron 78.8 millones de pesos a través de depósitos en efectivo (44 mdp), cheques de caja (14.7 mdp), transferencias bancarias y SPEI (19.7 mdp), mientras que egresaron a través de cheques de caja 64.4 millones de pesos, principalmente a miembros del partido, los cuales fueron cobrados en efectivo.”
¿¡Qué tal!? Le refinaron al PRI.
El consejero electoral Ciro Murayama, presidente de la Comisión de Fiscalización, explicó que esta acción constituye un fraude a la ley, pues se comprobó que la apertura de un fideicomiso, supuestamente para apoyar a los damnificados del sismo, fue creado y operado por la dirigencia del partido Morena.
“No se trata de una conducta irregular aislada, sino de una trama de financiamiento paralelo. Se constituye una figura permitida, un fideicomiso, pero se incumple la obligación de informar a la autoridad, además de que el fin de dar dinero a la población es ilegal para un partido”, sostuvo.
Y precisó que “el fideicomiso se nutre de recursos de procedencia prohibida como son los de origen desconocido -44.4 millones de pesos en efectivo- y provenientes de empresas (3.2 millones de pesos), además de que se ejerce un total de 64.4 millones de pesos a través de cheques de caja y en efectivo por 56 personas relacionadas con el partido -legisladores y candidatos- lo que es contrario al manejo lícito de las finanzas de un partido.”
Lo que no queda claro si esos recursos fueron aplicados directamente para financiar las campañas electorales. ¿De cuántos y cuáles candidatos de Morena vía la coalición “Juntos Haremos Historia”.
¿JUEGO LIMPIO?
En fin, que Ciro Murayama dijo: “Tolerar esta conducta implicaría fracturar las reglas del juego limpio con el dinero de los partidos políticos, permitir la opacidad y el uso de cantidades millonarias de dinero de origen desconocido, lo que pondría en riesgo la competencia democrática”.
Lás-ti-ma Mar-ga-ri-to, porque la competencia electoral ya pasó y no fue juego limpio. De hecho, todos jugaron sucio con financiamientos sacados quien sabe de dónde. Pero al parecer Morena innovó con un fideicomiso que le dio la vuelta a la ley.
Por cierto, la consejera electoral Pamela San Martín indicó: “Estamos ante un esquema de creación, operación y manejo de un fideicomiso de financiamiento paralelo de un partido político para recabar, manejar y sacar recursos de origen privado”.
¿Cómo ven? Y miren que Ciro Murayama y Pamela San Martín se han caracterizado por su ideología de izquierda; incluso, muchas veces defendieron acuerdos favorables a Morena y a AMLO. Y muy poco dijeron del adelantadísimo proselitismo del tabasqueño.
Entonces, no creo que la autoridad electoral haya sancionado a Morena por venganza como dijo López Obrador en un mensaje de Twitter.
Lo vieron ¿no? López Orador dijo: “La multa impuesta por INE a Morena por 197 mdp es una vil venganza. No existe ningún acto inmoral con el fideicomiso a damnificados por el sismo. Nosotros no somos corruptos ni cometimos ilegalidad. Por el contrario, buscan enlodar una acción humanitaria. Acudiremos a tribunales.”
¿Venganza? Caray, ya ni los consejeros electorales proclives al PRI. Más bien, el órgano electoral se vio siempre muy condescendiente con AMLO y con Morena.
Miren que irse en contra del árbitro electoral que condujo exitosamente su elección como Presidente de la República, es no reconocer a las instituciones que son pilares de la democracia y la paz en nuestro país.
Muy mal AMLO y Morena. De seguir así también le ganarán al PRI en cavar pronto su tumba política.
¿NULIDAD?
Por lo pronto, Andrés Manuel López Obrador será Presidente de México porque la contundencia de su triunfo –ahora quien sabe si gracias al cuestionado fideicomiso— es un dique para proceder a la anulación de la elección presidencial, aplicando una de las causales de la última fracción del artículo 41 de la Constitución Política General.
En dicho precepto se establecen las bases para anular una elección “por violaciones graves, dolosas y determinantes” en los siguientes casos: Exceder el gasto de campaña en un 5% del monto total autorizado; Comprar o adquirir cobertura informativa o tiempos en radio y televisión, fuera de los supuestos previstos en la ley; y recibir o utilizar recursos de procedencia ilícita o recursos públicos en las campañas.
Pero “dichas violaciones deberán acreditarse de manera objetiva y material”, y “se presumirá que son determinantes cuando la diferencia entre la votación obtenida entre el primero y el segundo lugar sea menor al 5%”.
Ups. ¡No se puede! La diferencia es abismal entre AMLO y su competidor más cercano, Ricardo Anaya. Claro, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) es la única que podría encontrar, fundamentar, argumentar y aprobar alguna causal de nulidad de la elección.
Pero difícilmente lo hará, porque además el sistema de nulidades tiene muchos obastáculos y candados.
Es más, puede ocurrir lo contrario: Que el TEPJF de revés a la decisión del Consejo General del INE de sancionar a Morena por las irregularidades vinculadas al fideicomiso. Ya ven como se las gastan algunos magistrados electorales, que cuando tienen “voluntad” hasta se hacen los desentendidos de la ley. Ahí está el caso de “El Bronco”.
En fin, no hay cómo anular la elección de AMLO; será Presidente de la República. Y el mismo mandato ciudadano dado en las urnas electorales lo obliga a ordenar a Morena que transparente los egresos e ingresos del cuestionado fideicomiso “Por los demás”.
LOS INTELECTUALES Y EL PADRECITO
Bueno y a todo esto que diran los intelectuales Laura Esquivel, Julio Scherer Ibarra, Jesusa Rodríguez, Pedro Miguel, Bertha Maldonado, Paco Ignacio Taibo y Elena Poniatowska, quienes según el propio anuncio de AMLO de septimbre pasado, serían quienes conformarían el fideicimiso.
Además del cura Alejandro Solalinde.
¿Conformaron o no el fideicomiso?
