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#Opinión Por: Rosy RAMALES
En los corrillos priistas cada vez es más fuerte el run run sobre la probabilidad de que Donovan Rito García se convierta en el coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en la próxima Legislatura, a instalarse el 13 de noviembre del año en curso.
Claro, no se convertiría en el pastor de la bancada gracias a una varita mágica, sino por decisión del jefe político del priismo oaxaqueño, salvo que éste deje en libertad a las diputadas y a los diputados de elegir a su coordinador o coordinadora de manera democrática.
Mmm… aunque francamente el priismo no funciona bajo reglas democráticas; funciona más bien siguiendo una línea, bajo la disciplina de un mando. Es una mala praxis. Sin embargo, la libertad los descontrola; no saben qué hacer cuando son libres, siempre buscan un jefe.
Ya se vio en Oaxaca cuando en el 2010 el PRI perdió la gubernatura y la mayoría en el Congreso del Estado, los priistas andaban como extraviados en su orfandad de mando único y cada quien agarró rumbo bajo el cobijo de alguno de los dos últimos ex gobernadores: Ulises Ruiz Ortiz y José Murat Casab.
Incluso, algunos se refugiaron en el manto protector de Diódoro Carrasco Altamirano, también ex gobernador oaxaqueño por el PRI, pero ahora militante del PAN gracias a los mismos priistas.
La formación de grupos internos en el PRI es evidente. Pero cuando tienen jefe político se reagrupan y caminan por una misma ruta, con sus excepciones. Por fortuna para los priistas, hasta ahora no han llegado al grado extremo de las tribus perredistas, cuyos líderes se acusan entre sí hasta de asesinatos. Ups, ¡imagínese en manos de quiénes está el PRD!
Claro, los priistas seguirán pelándose. Porque seguramente Ulises Ruiz buscará mantener algún coto de poder.
En fin, retomando el tema: El nombre de Donovan suena para coordinador del grupo parlamentario del PRI en la próxima Legislatura. ¿Será? Pues el planteamiento no es descabellado considerando que se trata de un joven político muy distinto a Bulmaro Rito, y que además tiene carácter y trato, lo cual le ha permitido mantener relación política con líderes de oposición.
Por supuesto, son características a tomarse en cuenta en un perfil idóneo para el liderazgo de la bancada priista. Pero no son todas. En la usanza priista, el jefe político demanda siempre el acompañamiento de un pastor cameral leal, máxime ahora cuando en lo que será la fracción parlamentaria del PRI quedó de chile, de mole y de manteca merced a los acuerdos internos para garantizar cierta unidad en la campaña electoral.
Entonces, seguramente no van a poner como coordinador o como coordinadora de la próxima bancada priista en el Congreso oaxaqueño a alguien que traicione o trabaje nada más para su propio futuro político. Eso parece que lo tienen claro quienes integran el grupo alejandrista.
Donovan Rito García ha sido un joven político que camina en la ruta de la institucionalidad partidaria. Y si su nombre ha empezado a sonar en los corrillos priistas, es porque de algún modo lo están considerando como uno de los prospectos a liderar la fracción parlamentaria del PRI, pero además el primer año de la Legislatura entrante, porque a esta bancada le corresponderá presidir la Junta de Coordinación Política.
¿Será Donovan el coordinador de la próxima bancada priista? Es buena propuesta.
Claro, en abanico de posibilidades siguen figurando Sofía Castro Ríos, María de las Nieves García Fernández, Samuel Gurrión Matías y José Antonio Ramírez Pineda.
Ya no falta mucho para despejar la incógnita, pues se aproxima la instalación de la LXIII Legislatura del Congreso del Estado. ¿Quién de ellos o ellas coordinará la fracción parlamentaria priista? ¿O nadie? Es probable también que el jefe político del priismo local tenga vista y apalabrada otra propuesta.
Eso sí, recomiendan no hacer grupismo ni buscar el padrinazgo interno de nadie, porque ahora ya tienen jefe.
