CRÓNICA POLÍTICA: Coalición 2018, ¿cómo en Oaxaca o cómo en Francia?

#Opinión Por:Rosy RAMALES

Qué tal con la propuesta de los líderes de la derecha y de la izquierda mexicanas de constituir un frente electoral para el 2018 con el propósito de sacar al PRI de la Presidencia de la República. Ups. ¿Sólo para eso? ¿No incluye la finalidad de gobernar y bien?

Pues según las declaraciones conjuntas de la presidenta del PRD nacional, Alejandra Barrales Madaleno, y del dirigente del PAN, Ricardo Anaya Cortés, la constitución del frente electoral tendería a un gobierno de coalición. Ajá, ¿y entre quiénes? ¿Entre los barralistas y anayistas?

Recuerden que el PRD está intestado de “tribus” y el PAN repleto de grupos e intereses diversos. Bueno, la invitación a sumarse al pretendido frente electoral la hicieron extensiva a todos los partidos políticos, fuerzas fácticas y ciudadanos.

¿Querrán conseguir el mismo milagro de Emmanuel Macron en Francia? ¿O de Gabino Cué Monteagudo en Oaxaca? A esta entidad del sureste mexicano le fue muy mal con la idea de la coalición fáctica que gobernó un sexenio dejando la “economía colapsada”, según han dicho los priistas que llegaron a la administración estatal, pero que no han dado señales de sancionar a Cué y cómplices… perdón, colaboradores que saquearon las arcas públicas.

Tras la coalición electoral, en la coalición fáctica gobernante Gabino Cué repartió posiciones precisamente al PRD, al PAN, al PT y al entonces Convergencia, además de las fuerzas fácticas que lo ayudaron a llegar a la gubernatura oaxaqueña: Sindicatos, curas y grupos priistas.

Era la primera ocasión, en el 2010, en que el PRI perdía la gubernatura oaxaqueña después de más de 80 años. La ciudadanía se mostraba realmente harta de los cínicos saqueos de los gobernadores y todo tipo de servidores públicos priistas. Así que la candidatura de Gabino Cué generó muchas expectativas; incluso hubiese ganado sin la coalición electoral porque las condiciones estaban dadas.

Pero Gabino Cué y sus aliados (PRD, PAN, PT, Convergencia en ese momento) no respondieron a la confianza ciudadana. Llegaron y se dedicaron a enquistarse en los espacios de poder, incluidos los órganos autónomos como el Instituto Electoral, la Auditoría Superior del Estado y el Instituto de Transparencia. Ah, y los colaboradores extra legales cogobernaron a placer.

Y tras la siguiente elección (la del 2016) se fueron de la gubernatura forrados de billetes sin que nadie los señalara siquiera. Así como si hubiese un acuerdo entre los salientes y los entrantes, como si éstos hubiesen ayudado a aquellos en el 2010 bajo el entendido que solamente sería un sexenio.

En fin, retomando el tema: Alejandra Barrales y Ricardo Anaya ¿quieren seguir el pésimo ejemplo oaxaqueño? ¿O quieren imitar la estrategia de Macron?

Ah, pero en el caso de Francia, Macron primero renunció a su militancia socialista, después formó un movimiento ciudadano, luego ofertó propuestas tanto de izquierda, como de derecha, así como del centro. Y cuando ganó incluyó en su esquema de gabinete a personas de las distintas filiaciones políticas.

No creo que en Francia, la izquierda, la derecha y el centro hayan aceptado participar en el gobierno de Macron solamente con el propósito de ir a saquear las arcas públicas. El joven presidente francés parece tener otra idea, una donde Francia es la estrella del foro y el punto de partida de todo desarrollo.

¿Lo mismo pretenden Barrales y Anaya con México? Aquí sí que lo dudamos, primero porque tanto el PRD como el PAN han demostrado ser peores que el PRI cuando llegan a gobernar… aunque los perredistas no han gobernado el país. Y segundo, cuando alguien coincide en el malinchismo de tener bienes en el extranjero, sinceramente no está pensando en el bien del país; y Alejandra y Ricardo han sido evidenciados por su inclinación hacia Estados Unidos.

Vaya, Ricardo Anaya hasta tiene a su familia viviendo en suelo gringo. Eso se llama tener mucha desconfianza en México y en los políticos mexicanos. Caray, qué paradojas.

Como bien dicho algunos políticos, con su anuncio de frente electoral para el 2018, pareciera como si Alejandra Barrales y Ricardo Anaya estuvieran adelantando la derrota del PRD y del PAN en las elecciones de este año a la gubernatura del Estado de México.

Pero también su miedo al 2018. Sin embargo, en su pretensión de ganar fortalecerían al aspirante a la Presidencia de México de Morena, Andrés Manuel López Obrador. Claro, es mejor votar por la izquierda, que por un hibrido de actuación incierta.

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